Quisiera ahora hablar un poco del marco de circunstancias, y el lugar físico de tan memorable dialogo. No fué casualidad que Cristo escogiera el Olivete para ésta conversación. El evangelio de Marcos nos muestra un detalle importante:
"Y estando él sentado en el monte de los Olivos con el templo a la vista, Pedro y Santiago y Juan y Andrés empezaron a preguntarle privadamente" (Marcos 13:3)
Cómo observamos, hay un quinto invitado a ésta conferencia de Jesús: El Templo. Ellos observan el horizonte desde el monte y miran constantemente el Templo. Como iremos comprobando en las sucesivas entradas, el Templo era el pensamiento dominante y un eje central de la profecía.
No es casualidad que el estudio llamado "El Modelo Cronológico del Santuario"* apunte a un Templo como la simbolización de una línea temporal en el desarrollo de los propósitos de Dios. Sí, el Templo y Jerusalén son los ignorados protagonistas de los estudios sobre ésta narración. Jesús ya antes había visitado y llorado frente a Jerusalén y su Templo. A sus 12 años le conmovió estar en la Casa del Padre, y más adulto se indignó ante el mercantilismo en dicho lugar. El Templo es la clave y sin duda será esencial en ésta etapa de éstos estudios.
* Nota: Tanto Abib como G.R comenzaron a masificar dicho esquema de la cronología. Con el tiempo lo he puesto a prueba y efectivamente es un estudio con grandes significados e importancia.
