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Recientemente he podido vislumbrar con más claridad una de las claves proféticas más importantes. Notemos lo que dijo Jesús:
4 Y en contestación, Jesús les dijo: “Cuidado que nadie los extravíe; 5 porque muchos vendrán sobre la base de mi nombre, diciendo: ‘Yo soy el Cristo’, y extraviarán a muchos. 6 Ustedes van a oír de guerras e informes de guerras; vean que no se aterroricen. Porque estas cosas tienen que suceder, mas todavía no es el fin. 7 ”Porque se levantará nación contra nación y reino contra reino, y habrá escaseces de alimento y terremotos en un lugar tras otro. 8 Todas estas cosas son principio de dolores de angustia. - Mateo 24:4-8
5 De modo que Jesús comenzó a decirles: “Cuidado que nadie los extravíe. 6 Muchos vendrán sobre la base de mi nombre, diciendo: ‘Yo soy ese’, y extraviarán a muchos. 7 Además, cuando oigan de guerras e informes de guerras, no se aterroricen; [estas cosas] tienen que suceder, pero todavía no es el fin. 8 ”Porque se levantará nación contra nación y reino contra reino, habrá terremotos en un lugar tras otro, habrá escaseces de alimento. Estos son principio de dolores de angustia. - Marcos 13:5-8
8 Dijo: “Cuidado que no los extravíen; porque muchos vendrán sobre la base de mi nombre, y dirán: ‘Yo soy ese’, y: ‘El debido tiempo se ha acercado’. No vayan en pos de ellos. 9 Además, cuando oigan de guerras y desórdenes, no se aterroricen. Porque estas cosas tienen que suceder primero, pero el fin no [sucede] inmediatamente”. 10 Entonces pasó a decirles: “Se levantará nación contra nación, y reino contra reino; 11 y habrá grandes terremotos, y en un lugar tras otro pestes y escaseces de alimento; y habrá escenas espantosas, y del cielo grandes señales. - Lucas 21: 8-11
Hay algo trascendental en las palabras de Cristo. El habla de personas de una generación que estuviesen vivas contemplando los sucesos. Él dice: "ustedes van a oir". Por lo tanto, los sucesos no son eventos que ocurren muchas décadas antes del fin, sino más bien, son sucesos contemplados que son vistos por las mismas personas que tienen la perpectiva de sobrevivir al fin. Notemos que más adelante Cristo dijo:
28 Pero al comenzar a suceder estas cosas, levántense erguidos y alcen la cabeza, porque su liberación se acerca”.- Lucas 21:28
33 Así mismo también, ustedes, cuando vean todas estas cosas, sepan que él está cerca, a las puertas.- Mateo 24:33
Tanto las personas que observaron la I y II Guerra Mundial ya han muerto en su mayoría. La inmensa cantidad de habitantes contemporáneos no vieron ni oyeron personalmente ámbos sucesos. No observamos dichas guerras. Son historia pasada. Jesús en cambio, nos habla de una generación que tiene que ver y oir las noticias de los sucesos y que puede sobrevivir. Solo en personas vivas, que sepan que su liberación está cerca, y que observan dichos sucesos, las palabras de Jesús pueden cumplirse. Ésto nos muestra que los acontecimientos son sucesos recientes.
Además, solo en la actualidad las palabras de Jesús pueden tener un cumplimiento pleno. "Ustedes van a oír de guerras e informes de guerras, desórdenes". Solo en un mundo simultáneo de noticias globales los informes de los acontecimientos pueden ser observados en instantes. Hace décadas las noticias se demoraban días y semanas. Hoy, de inmediato todo el mundo puede "oir" éstos informes.
"Vean que no se aterroricen", es la exhortación ante los fenómenos fuertes (incluso informes de guerra) que están circulando. Ésto muestra que los extraños fenómenos, incluso el inminente "golpe de espada" traerá terror a la población global. Muchos creerán que viene el fin de forma inmediata. La primera sensación será declarar que estalla la gran tribulación.
"Porque estas cosas tienen que suceder, mas todavía no es el fin", "no se aterroricen; [estas cosas] tienen que suceder, pero todavía no es el fin", "pero el fin no [sucede] inmediatamente".
Cómo notamos, ésta advertencia repetida en los tres Evangelios no hubiese tenido sentido si los sucesos fueran eventos que han estado ocurriendo desde hace muchas décadas. Son eventos importantes y aterradores recientes que tienen el suficiente impacto para que los cristianos sean engañados con un fin inminente y peligroso.
Lucas agrega que tras el impacto de éstos sucesos, muchos dirán ‘El debido tiempo se ha acercado’. Ésta frase (con un sentido muy de fecha) sin duda alcanzará un climax por todos lados con los eventos recientes y la cercanía con 2012.
Será una trampa declarar que la gran tribulación estallará como producto de éstos fenómenos. Ahora bien, ¿en que parte de la secuencia profética están aconteciendo los sucesos recientes?
Éstos sucesos previos al inicio de los 42 meses se volverán más aterradores, incluyendo rumores de guerra, desórdenes, etc. Los extraños fenómenos de la muerte de animales y otros asuntos climáticos, incluyendo terremotos, pestes y hambrunas, harán crecer los rumores del inminente fin del mundo. Pero no debemos engañarnos. Éstos acontecimientos cumplen la profecía, pero "el fin no [sucede] inmediatamente".
¿Qué provocará en las religiones organizadas la no llegada del fin del mundo? Tras la sacudida, éstas se apresurarán a declarar la gran tribulación. Sin embargo, la Bestia asumirá como salvavidas la dominación final global por 42 meses. La aparente llegada de la tribulación se habrá desvanecido.
Ante el no cumplimiento de las cosas como se esperaban, la mayoría de los fieles sufrirán una crisis de Fe. Ésto ayudará a que posteriormente la Bestia aniquile a las religiones y movimientos "fin del mundo". Una gran confusión y un posterior relajo se apoderará de millones. La gente no quedará con fuerzas y deseos para volver a mantenerse alerta. Esto será fatal. ¿Por qué Jesús advierte en su prólogo de que no debemos caer en ésta trampa? Por que asi los sucesos van a acontecer. Y muchos no quieren "ver" y "aceptar" la advertencia de Jesús.
Hoy nos encontramos en el inicio de los sucesos previos aterradores que harán creer que el Fin es inmediato. Los hechos recientes y los por venir, provocarán exitación en muchos cristianos, pero al no tener una óptica completa de las profecías, al no haber querido observar bien la Palabra de Dios debido a la ceguera de sus dirigentes, millones sufrirán decepción.
1Sin embargo, hermanos, tocante a la presencia de nuestro Señor Jesucristo y el ser nosotros reunidos a él, les solicitamos 2 que no se dejen sacudir prontamente de su razón, ni se dejen excitar tampoco mediante una expresión inspirada, ni mediante un mensaje verbal, ni mediante una carta como si fuera de nosotros, en el sentido de que el día de Jehová esté aquí.
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3 Que nadie los seduzca de manera alguna, porque no vendrá a menos que primero venga la apostasía y el hombre del desafuero quede revelado, el hijo de la destrucción. - 2 Tes. 2:1-3
Éstamos en tiempos críticos y complejos. Es esencial no bajar la guardia, no pensando que el fin está lejos, sino todo lo contrario: Hay poco tiempo. El poco tiempo es para prepararse y no para sentarse a esperar. Los errores que cometamos en éste poco tiempo tendrán consecuencias eternas. Lo que hagamos o no hagamos nos pasará la cuenta. En éste punto las religiones tienen razón. Sin embargo, la dirección errada de las expectativas es lo que traerá la dificultad. Muchas cosas van a acontecer en poco tiempo y en contra de lo que cree la mayoría. No habrá tiempo para reaccionar.
Nuestra guardia actualmente debe ser evitar que nos exitemos prematuramente sobre el fin de fines inminente. No olvidemos la secuencia profética y que nuestra Fe será probada. En poco tiempo, los asuntos universales serán resueltos. Así que es esencial mantener la vigilancia y aprovechar el escaso tiempo favorable que tenemos para prepararnos para sobrevivir.
No nos desanimemos, Cristo dijo:
“Noten la higuera y todos los otros árboles: Cuando echan ya brotes, al observarlo conocen por ustedes mismos que ya se acerca el verano. Así también ustedes, cuando vean suceder estas cosas, conozcan que está cerca el reino de Dios.” (Lucas 21:29-31)
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El Reino de Dios será establecido muy pronto. Está muy cerca. Los sucesos actuales solo son como brotes que se harán cada día más evidentes. Gracias a la Palabra de Dios tenemos claridad de lo que va a ocurrir.
