martes, 22 de marzo de 2011

Los Reyes en conflicto: ¿Quiénes son?

En una oportunidad (en noviembre de 2010) en la red social Alicia Machado dijo la siguiente frase: “que me acompañen en una oración, por la paz que estos ataques entre las Chinas no empeoren nuestra situación”. Era una referencia al conflicto reciente de hace pocos meses entre Corea del Norte y Corea del Sur. La frase de la ex Miss universo provocó toda suerte de burlas y chanzas. La verdad es que la falta de rigor provoca estas situaciones hilarantes. De la misma forma como agrupar a los japoneses, coreanos del norte y del sur, filipinos y vietnamitas como “chinos”, de la misma forma creo que llamar “Rey del Sur” a la Liga Árabe (o los árabes rebeldes) puede ser prematuro o inexacto.

Cuando realizamos especulación profética es importante ajustarse a los hechos que son. Y no especular con hechos que no son. Por lo menos para que la especulación tenga cierta base o posibilidad. El no ajustarse a la realidad convierte la situación en una hipótesis carente de rigor informativo. Nadie puede “predecir” el futuro de esa forma, y la interpretación profética o elaboración de posibilidades deben ajustarse a los hechos que son o a las posibilidades lógicas viables. El hacer lo contrario resta seriedad al asunto, lo complica y transforma en un asunto irrisorio, de la misma forma como durante muchas décadas se han apuntado cual tiro al blanco interpretaciones como la “generación del 14”, etc.

Al respecto, analicemos la realidad y no escenarios ficticios. Por lo menos de esa forma, la especulación tendría cierta base probable. Formulemos al respecto algunas preguntas:

¿Está la Liga Árabe en contra de la ONU y los países occidentales? ¿Forma una coalición o bloque unido para que pueda ser considerado un “Rey”?

Recordemos que nuestra respuesta debe basarse en la realidad y no en un escenario hipotético que no existe. Creer que el asunto pueda degenerar en lo que no es ahora es aventurarse en un terreno que no es seguro.  La realidad es que la Liga Árabe fue la que pidió la intervención de la ONU y su apoyo fue decisivo para los ataques de estas horas. Hablar al voleo de que éste es un conflicto entre Occidente y los Árabes (como si ambos fuesen dos bloques) demuestra la misma desinformación de la Modelo que dijo que el conflicto entre Corea del Norte y Corea del Sur era un conflicto entre “las chinas”.

 La evidencia máxima a juicio de algunos observadores ha sido la aparición en Al Yazira, el pasado domingo, de Yusuf al Qardawi, gran referente teológico en el mundo musulmán suní. Qardawi salió a la palestra para decir que las operaciones contra Gadafi no son una "cruzada" como dijo el líder libio, sino una demanda de los árabes. De hecho, algunos  internautas árabes felicitaban a los países aliados y la  noticia titulada Aviones árabes participan en la misión en Libia era la más leída en la web de Al Arabiya. Esto era en referencia Catar, el emirato fundador y financiador de Al Yazira participe con cuatro aviones en la misión bélica contra Libia. Hace pocas horas Bam Ki-moon agradeció el apoyo de la comunidad árabe, sin la cual hubiera sido imposible aprobar la resolución. El se reunió en Egipto con el secretario general de la Liga Árabe, Amro Musa. No olvidemos que los árabes “venden” su “oro negro líquido” a occidente y no perderían a sus compradores. Ante todo los árabes son comerciantes.

Para salvar esta situación algunos ahora están hablando de los países “rebeldes de la Liga Árabe”, puesto que como vemos la “Liga” parece no encajar con un oponente del nivel de occidente. Pero ahora hablar de los “rebeldes” esquiva la cuestión y la arrincona a una situación más improbable. Irán no forma parte de la Liga Árabe (Irán no es un país árabe)  y no es considerado un “socio” viable por ellos. Si bien comparten la religión Islámica tienen antecedentes raciales distintos. Ellos (Irán) son descendientes de los persas. Una cultura que se remonta por lo menos mil años antes y pertenecen a grupo étnico (indo arios) diferente a la comunidad árabe. Incluso al momento de la expansión del Islam, Persia no asume la tendencia general sino una vertiente diferente de la que adoptaron los árabes. Ellos son chiíes. Tanto la organización política como religiosa los hacen diferentes.

Esto quedó manifestado cuando Israel ha atacado a Gaza y a los Palestinos. También cuando Estados Unidos invadió Afganistán e Irak. Ningún país árabe, ni siquiera los Iraníes se involucraron en el conflicto. La razón es sorprendente. De hecho, un chiste árabe explica la situación a la perfección:

"Los árabes sólo están de acuerdo en que no están de acuerdo".

 Los motivos son ancestrales. Descendientes de familias y clanes nómadas, los árabes tienden a preocuparse por su clan o grupo y son reacios a formar bloques o alianzas globales entre ellos. La invasión de los Egipcios, Alejandro Magno, los Romanos, los británicos y otros tantos han demostrado que ellos prefieren ser comerciantes locales más que a tener ambiciones imperialistas como si fuesen un “Rey” o “potencia” opositora a occidente. En realidad han aceptado los sometimientos extranjeros debido a las relaciones comerciales que establecen con los “invasores”. Por esa razón es improbable que algunos países árabes formen un grupo o coalición contra occidente. El petróleo agrega peso a esta cuestión.

La  diferencia de la Liga Árabe  con otras organizaciones como la Unión Europea es que no ha conseguido un grado importante de integración regional y en que la organización no mantiene relaciones directas con los ciudadanos de sus Estados-miembro. La carta fundacional de la Liga Árabe declara que coordinará asuntos económicos, incluyendo relaciones comerciales. El tema se centra en lo comercial y no en lo político. Los otros países supuestamente rebeldes están sumidos en caos internos y no tienen la capacidad para hacer sociedad en forma de bloques.

Esta es la realidad sobre los países árabes. Por lo tanto, es difícil que ellos puedan ser un “Rey” unido que bloquee, luche y pugne contra otro bloque de poder. Notemos las expresiones de Daniel:

 ”Y el rey del sur se hará fuerte, aun [uno] de sus príncipes; y prevalecerá contra él y ciertamente gobernará con dominio extenso [mayor que] el poder gobernante de aquel” – Daniel 11:5

 ”Y el rey del sur se amargará y tendrá que salir y pelear con él, [es decir,] con el rey del norte; y ciertamente hará que una muchedumbre grande se ponga de pie, y la muchedumbre realmente será dada en mano de aquel” – Daniel 11:12

 ”Y en lo que respecta a estos dos reyes, su corazón estará inclinado a hacer lo que es malo, y en una misma mesa una mentira es lo que seguirán hablando. Pero nada tendrá éxito, porque [el] fin todavía es para el tiempo señalado” – Daniel 11:27.

En éstos versículos notamos que el Rey del Sur tiene un gran poder global. De hecho, se nos transmite una pugna por la dominación global, hasta el grado de compartir en una “mesa” la lucha de fuerzas. Se nos muestran dos bloques que pugnan por la supremacía del mundo.

Como observamos, los textos van más allá de una literalidad geográfica. A luz de los hechos, solo caben superpotencias que disputan la soberanía global. Por esa razón, la Watchtower discernió de forma apropiada que cuando el mundo estaba polarizado (dos bloques) en la guerra fría, Estados Unidos y la Unión Soviética era los dos reyes. Hoy, la disputa no solo ha quedado en el plano militar y ha pasado al plano financiero. Así Estados Unidos versus China-Rusia se presenta como el escenario de la pugna por la dominación mundial.

Otro punto vital en la narración para una correcta interpretación actual es el papel del  “pacto santo”, “santuario”, “el [rasgo] constante”, “el pueblo que conoce a su Dios”, etc; que aparecen en medio de la pugna de los dos reyes. Algunos solo ven un sentido geográfico literal para el conflicto de los Reyes. Se toma como referencia los países que están al Norte y al Sur de Israel, pero esta literalidad llevaría implícito aceptar que las referencias al “pacto santo”, “santuario”, “el [rasgo] constante”, “el pueblo que conoce a su Dios” se refieren hoy en día al Israel Carnal como si estos fueran el “pueblo de Dios”. Más bien esta idea se parece a la visión fundamentalista evangélica que a una visión espiritual en dónde el lugar geográfico literal no es la clave de la profecía, sino más bien la actitud “espiritual” de todos los involucrados. Es el “espíritu” del Egipto Moderno y el “espíritu” del Rey del Norte Moderno, y es el “espíritu” del actual pueblo de Dios la clave del asunto. Insistir en una literalidad al norte o sur, sería similar a creer que la verdadera descendencia de Abrahán son solo los judíos naturales.

Además, las profecías de Isaías y Ezequiel ya analizadas en este blog contienen endechas contra el Egipto profético y sentencias contra los miembros del Pueblo de Dios que buscan refugio en esas instituciones políticas. Solo en potencias de aspecto liberal (similares al Egipto antiguo) son las únicas candidatas para entrar en esa categoría. No tendría sentido que los cristianos buscaran refugio a su libertad religiosa en el mundo árabe o musulmán.

Estas razones  son muy evidentes por que van más allá de un sentido geográfico obvio de países con asesores de Iglesias evangélicas (como Estados Unidos) que pueden acomodar la interpretación para su beneficio.

 Como observamos, con el tiempo, el hecho de la designación geográfica “Norte” o “Sur” que literalmente situaban a las potencias en conflicto al Norte o al Sur de Israel,  cambió su sentido, destacando más bien a los herederos de las tradiciones “del Sur” o “del Norte” más que su significación geográfica literal.

Pero es interesante según el vocablo  y algunos pasajes bíblicos, que varios países o reinos (entre ellos: Asiria [Sof 2:13] y Babilonia [Jer 46:10]) que estaban situados, al menos hasta cierto punto al Norte y al Este de la tierra habitada por los israelitas, se les designaba por solo Norte. Aunque Babilonia, emplazada junto al río Éufrates, realmente se encontraba al Este de Tiro, Ezequiel 26:7 dijo que el rey de Babilonia iría contra Tiro desde el Norte. De igual manera, se dijo que la calamidad que Judá y Jerusalén tenían que experimentar a manos de los babilonios procedería “desde el norte”. (Jer 1:14, 15.) Así que la Expresión “Norte” esconde un doble significado, a la luz de éstos y otros casos proféticos, que son prácticos para nuestros días y que encubren Realmente el Este, la Tierra del Sol Naciente. Es así que realmente “El Rey del Norte”, que en su última encarnación fue la Unión Soviética efectivamente estaba al “Norte” desde el sentido de ocultación profético judío, pero literalmente estaba al Este. Por el contrario el Actual “Rey del Sur” Estados Unidos (que se mantiene vigente como Rey del Sur y Potencia) efectivamente está en la dirección opuesta al Israel de la actualidad, al Oeste, en América.

Pero más importante aún es que debemos considerar el hecho de que ambos “Reyes” han heredado los conocimientos y tradiciones de sus predecesores. El caso más sobresaliente, quizá por su línea casi ininterrumpida de identidad ha sido el de Estados Unidos. Aunque a muchos quizás les sorprenda, Estados Unidos, en su aspecto político hermético interno ha mantenido una tradición proveniente desde los egipcios y trasladada por la Masonería desde sus comienzos. George Washington y muchos de sus sucesores fueron y han sido masones por excelencia con emblemas y conocimientos herméticos egipcios. De hecho en el Dólar, símbolo de la economía y el poder mundial, aparece el sello supremo masón, un símbolo egipcio con el Ojo de Horus, “El Ojo Siempre Presente” en la Pirámide Sagrada. En base a esto, las mentes que idearon la nueva nación trajeron paulatinamente símbolos desde Egipto, como obeliscos y columnas, además de arquitectura helénica (griega) que había sido inspirada por la Egipcia colocándolos en sus capitales como Nueva York (Capital Financiera) y Washington (Capital Política). Es así que efectivamente el Rey del Sur Actual esconde los Tesoros (no solo económicos) de la sabiduría mística y filosófica de Egipto. (Véase Daniel 11:43).

Además, no olvidemos que la  Cosa Repugnante que Causa Desolación es colocada por el Rey de Norte o él patrocina esa colocación,  profanación y supresión de la actividad cristiana pública. En gobiernos Neo-Liberales un ataque contra los cristianos es muy difícil (Estados Unidos es el Paladín pro-religión). Más bien el “hacer añicos el poder del pueblo santo” (Dan. 12:7) proviene claramente de Entidades anti-religiosas. Esto cuadra con el antiguo y literal Rey del Norte. Los romanos persiguieron cruelmente a los cristianos. ¿Qué super potencias en la actualidad manifiestan hostilidad hacia la religión y especialmente hacia los cristianos? ¿Qué muestran los hechos actuales?

En realidad es bueno tener en cuenta todas estas reflexiones a la hora de intentar determinar la identidad de los reyes en conflicto.