miércoles, 5 de octubre de 2011

¡Miren! Les digo un secreto sagrado


Para la mayoría de las iglesias evángelicas el rapto (arrebatamiento) es la creencia de que los cristianos fieles serán tomados de la Tierra, para unirse al Señor en los cielos. Incluso se habla de un rapto pre-tribulación (La mayoría de las personas que abogan por esta tesis, creen que después del arrebatamiento (anterior a la manifestación del Anticristo y a la Gran tribulación) habrá un gran caos en la tierra durante 7 años (gran tribulación), la Metodista Pentecostal apoya ésta idea.

Para la Iglesia Católica este asunto es intrascendente (niegan el arrebatamiento porque es una doctrina   que no se recoge  en la Tradición de la Iglesia (Santos Padres de la Iglesia, magisterio de los Papas, Concilios,...) , y los testigos de Jehová oficialmente lo interpretan como una resurrección instantánea de los ungidos desde 1918 en adelante. Cómo dijo una publicación: “Después de morir fieles durante la presencia de Cristo, cada uno de los del resto del Israel espiritual recibe instantáneamente su galardón celestial. “En un abrir y cerrar de ojos” es resucitado como espíritu y “arrebatado” al encuentro de Jesús para ser cogobernante con él en el Reino de los cielos”- Atalaya 1993 15/01. Algunos grupos ufológicos hablan de una especie de rapto ovni en naves físicas. Ahora bien, ¿podemos obtener una mayor comprensión de éstos asuntos?


En realidad, la Biblia si habla de que los cristianos serán "arrebatados". Para comenzar nuestro análisis, observemos éstos puntos:

1- Qué dicen los versículos alusivos.

2- En que contexto los escribió Pablo.

¿Qué nos narra la Biblia?

1 Corintios 15:51-55
51 ¡Miren! Les digo un secreto sagrado: No todos nos dormiremos [en la muerte], pero todos seremos cambiados, 52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, durante la última trompeta. Porque sonará la trompeta, y los muertos serán levantados incorruptibles, y nosotros seremos cambiados. 53 Porque esto que es corruptible tiene que vestirse de incorrupción, y esto que es mortal tiene que vestirse de inmortalidad. 54 Pero cuando [esto que es corruptible se vista de incorrupción y] esto que es mortal se vista de inmortalidad, entonces se efectuará el dicho que está escrito: “La muerte es tragada para siempre”. 55 “Muerte, ¿dónde está tu victoria? Muerte, ¿dónde está tu aguijón?

Pablo nos habla de un “secreto sagrado”, una revelación nueva, que no había sido mencionada antes en las Escrituras. Hablamos de una información nueva que va más allá de la creencia en la resurrección. Ahora bien, note con claridad lo que dice el apóstol: “no todos nos dormiremos en la muerte”. ¿Estaba pensando Pablo en morir cuando escribió éstas palabras? No, el texto es claro, a menos que queramos ver otra cosa. Lo que él dijo es la realidad, algo nuevo aparte de la Resurrección. No podemos interpretar las palabras del apóstol y creer que decía otra cosa. El hizo una diferencia entre los muertos y los vivientes. Pablo cuando escribió la carta a los corintios, pensaba que el fin lo vería durante su vida, no muy lejos.

Sin embargo, Pablo habla de algo que con los siglos se ha interpretado mal. Está claro que al escribir éstas palabras él no pensaba en morir. Pero fijémonos en la frase que usa sobre los que no morirán: “seremos cambiados”. ¿En que momento? Durante el toque de la “última trompeta”. Algo que también está narrado en el Apocalipsis y mencionado en Daniel a grandes pinceladas.

Ahora bien, el apóstol separa los grupos. Habla de los muertos resucitados y el grupo que será "cambiado", aunque tanto resucitados como vivientes adquieren un cuerpo "cambiado". Es evidente que son dos cosas distintas (resurrección y vivientes), y en ésta época de su vida Pablo se identifica con el grupo de los vivientes, no con los resucitados. Pablo habla de dos grupos. Entonces menciona el destino de ambos grupos a continuación, y esto último ha sido confundido por multitudes de iglesias actuales.

“Porque esto que es corruptible tiene que vestirse de incorrupción, y esto que es mortal tiene que vestirse de inmortalidad”. Por lo general se tiende a asociar lo de la incorrupción creyendo que es lo mismo que la inmortalidad. Pero leamos bien la frase y el contexto. Ya que Pablo habla de dos grupos, a continuación, solo sigue narrando el destino para esos dos grupos.

La “incorrupción” sería para los resucitados. Los versículos anteriores son claves, ya que se dice:

42 Así también es la resurrección de los muertos. Se siembra en corrupción, se levanta en incorrupción. 43 Se siembra en deshonra, se levanta en gloria. Se siembra en debilidad, se levanta en poder. 44 Se siembra cuerpo físico, se levanta cuerpo espiritual. Si hay cuerpo físico, también lo hay espiritual.- 1 Corintios 15:42-44

También en el mismo contexto, Pablo dice: “Porque sonará la trompeta, y los muertos serán levantados incorruptibles, y nosotros seremos cambiados” – 1 Corintios 15:52. Así que la “incorrupción” es asociada a los muertos que son levantados para vida celestial.

¿Y lo mortal “tiene que vestirse de inmortalidad”? Pablo intencionadamente separa los dos estados, e identifica que los que son “cambiados” son los que se “visten” de “inmortalidad”. Es interesante que no se use la palabra “inmortalidad” en relación a los resucitados, más bien parece estar relacionada con los que son “cambiados” vivos.


Si los vivientes y los muertos recibieran la misma resurrección celestial, Pablo estaría confundiendo a los corintios al decir "no todos nos dormiremos en la muerte". Algunos sugieren que esto significa que resucitarían de forma instantánea, sin gustar la muerte o estar en ese estado. Pero si ellos no "gustan la muerte"  entonces no podrían ser resucitados, puesto que la resurrección involucra levantar a personas que han muerto. Alguién no podría ser "resucitado" sin "gustar la muerte".  No existe eso de "resurrección instantánea" sin gustar la muerte porque provoca una contradicción. Esa explicación es rocambolesca, pero carece de todo fundamento. Cuando Pablo dijo "no todos nos dormiremos en la muerte" dijo simplemente eso mismo.

Debido a la primera impresión, la palabra “inmortalidad” es asociada malamente por las iglesias con la inmortalidad del alma. También ha sido asociada con una resurrección celestial. Pero para sorpresa de todos los lectores, vuelvo a repetir que en esta parte del texto Pablo no está hablando de los resucitados. Recordemos que el habla de un secreto sagrado más allá de la resurrección. La palabra "inmortalidad" significa simplemente “no mortalidad”. Gr.: a•tha•na•sí•an y en heb.: ’al-má•weth, “no-muerte”. El término griego (a•tha•na•sí•a) se forma con el prefijo negativo a seguido de una forma de la palabra “muerte” (thá•na•tos). En consecuencia, el significado básico es “no mortalidad”, y con él se alude a la cualidad de la vida de que se disfruta: vida inacabable. En otras palabras, los “cambiados” no son resucitados, pero adquieren una propiedad única y que jamás había sido revelada: sus cuerpos dejan de morir. Se visten de no-muerte. Hay una transformación a nivel atómico.  Cómo observamos, el sentido de la palabra "inmortalidad" no tiene nada que ver con las interpretaciones actuales de esa expresión.


1 Tesalonicenses 4: 13-18
13 Además, hermanos, no queremos que estén en ignorancia respecto a los que están durmiendo [en la muerte]; para que no se apesadumbren ustedes como lo hacen también los demás que no tienen esperanza. 14 Porque si nuestra fe es que Jesús murió y volvió a levantarse, así, también, a los que se han dormido [en la muerte] mediante Jesús, Dios los traerá con él. 15 Porque esto les decimos por palabra de Jehová: que nosotros los vivientes que sobrevivamos hasta la presencia del Señor no precederemos de ninguna manera a los que se han dormido [en la muerte]; 16 porque el Señor mismo descenderá del cielo con una llamada imperativa, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los que están muertos en unión con Cristo se levantarán primero. 17 Después nosotros los vivientes que sobrevivamos seremos arrebatados, juntamente con ellos, en nubes al encuentro del Señor en el aire; y así siempre estaremos con [el] Señor. 18 Por consiguiente, sigan consolándose unos a otros con estas palabras.

Este relato es un complemento de la Primera a los Corintios. Pablo habla nuevamente de los “vivientes”, quienes sobrevivirán hasta la Parausía (presencia) de Cristo. Nuevamente se habla del toque de trompeta, y con claridad se vuelven a separar los grupos. Se dice que “los muertos en unión con Cristo se levantarán primero”. Luego Pablo es extremadamente claro al declarar que “nosotros los vivientes que sobrevivamos seremos arrebatados”. Pablo nuevamente cree que sobrevivirá hasta ver el día de Jehová y que no resucitará. Más bien, será uno de los vivientes. La frase “los vivientes que sobrevivamos” significa literalmente “: “los (que) sean dejados alrededor” (T.N.M). Esto es una clara alusión al rescate de los escogidos que estarán en toda la Tierra (esparcidos alrededor) al tiempo del rescate en la gran tribulación tal como muestra Mateo 24: 31:

"Y él enviará sus ángeles con un gran sonido de trompeta, y ellos reunirán a los escogidos de él desde los cuatro vientos, desde un extremo de los cielos hasta su otro extremo".

Pero, ¿no significa la expresión “seremos arrebatados, juntamente con ellos, en nubes al encuentro del Señor en el aire; y así siempre estaremos con [el] Señor”, que esto alude a una resurrección celestial? En realidad es posible que Pablo dado que tenía la esperanza celestial creía que después del rescate o arrebatamiento (sacado repentinamente de la tierra por los ángeles) su cuerpo sería transmutado a un cuerpo  glorioso. Y eso efectivamente nos transmite el relato. Y quizás esto ocurra para los últimos sobrevivientes.  Pero también la revelación bíblica perfectamente puede estar refiriéndose a los miembros de la gran muchedumbre que serán rescatados, sus cuerpos “cambiados” y “vestidos” de “no-muerte” al producirse un cambio en su estructura molecular que lo volverá aptos para regresar a la Tierra y vivir para siempre en una nueva etapa en dónde todas las estructuras atómicas materiales serán modificadas y vibrarán a otro nivel, evitando el deterioro, oxidación y desgaste de las cosas. La gran muchedumbre “estará con el Señor” de la misma forma como Jesús acompañará en el Paraíso al malhechor en Lucas 23:43. Y tampoco olvidemos que a la Gran Muchedumbre saliente de la Gran Tribulación primero se le describe en el "Cielo", y luego es conducida a "fuentes de agua de vida", quizás en una nueva etapa para la restauración de la Tierra.

El contexto de la 1 Corintios y 1 Tesalonicenses
Ambos libros fueron completados entre el año 50 al 55. Reflejan grandes revelaciones y verdades futuras, pero Pablo se incluye en ellas colocando un punto de vista personal, que luego sería modificado. En esos años, el apóstol no veía la muerte en su carrera cristiana. Antes bien, él se consideraba un “sobreviviente” de la venidera gran tribulación, tal como comentamos, y tal como se refleja de forma evidente en los textos leídos.

¿Cambió Pablo su punto de vista? Al parecer sí. Esto no quiere decir que el secreto sagrado de la carta a tesalónica y corinto estaba errada. Más bien, Pablo ahora aclaró su participación en esa esperanza. Quizás el desgaste de los años y una reflexión sobre su vida le hicieron decir otras declaraciones. En el año 60-61 se escribió la carta a los Filipenses, y él escribe:

23 Estas dos cosas me tienen en premura; pero lo que sí deseo es la liberación y el estar con Cristo, porque esto, de seguro, es mucho mejor.- Filipenses 1:23

Al respecto de éste texto, hay una interesante declaración del Apéndice de la Traducción del Nuevo Mundo:
"De ninguna manera está diciendo el apóstol aquí que inmediatamente que muriera sería transformado en un espíritu a fin de estar para siempre con Cristo. El llegar a estar con Cristo el Señor sólo será posible a la vuelta de Cristo, cuando los muertos en Cristo se levanten primero, según la propia declaración inspirada del apóstol en 1Te 4:15-17. Es a esta vuelta de Cristo y a la liberación del apóstol para estar siempre con el Señor a lo que Pablo se refiere en Flp 1:23. Ahí él habla de dos cosas que le son posibles inmediatamente, a saber: 1) seguir viviendo en la carne, y 2) morir. Debido a las circunstancias que debían considerarse, él dijo que se hallaba bajo presión procedente de estas dos cosas, y no dio a saber cuál de ellas seleccionaría. Entonces presenta una tercera cosa, que realmente desea. No hay duda de que esto que desea es preferible para él, a saber, “la liberación”, porque significa estar con Cristo.

Por lo tanto, la expresión to a•na•lý•sai, “la liberación”, no puede aplicarse a la muerte del apóstol como criatura humana y su partida de esta vida. Tiene que referirse a los sucesos que tienen lugar para el tiempo de la vuelta y la presencia (véase Ap. 5B) de Cristo y la resurrección de todos los muertos en Cristo para estar con él para siempre. – Apéndice TNM

Cómo vemos, en ésta etapa Pablo ya estaba dudando sobre si seguiría con vida para ver la Parausía o tendría que morir. Ya cuando él escribe a Timoteo en el año 65 le dice lo siguiente:

6 Porque ya estoy siendo derramado como libación, y el debido tiempo de mi liberación es inminente. 7 He peleado la excelente pelea, he corrido la carrera hasta terminarla, he observado la fe. 8 De este tiempo en adelante me está reservada la corona de la justicia, que el Señor, el justo juez, me dará como galardón en aquel día; sin embargo, no solo a mí, sino también a todos los que han amado su manifestación.- 2 Timoteo 4: 6-8

Pablo está preso en Roma y tiene claro que su destino es morir y ahora sabe que debe resucitar. El ahora tiene claro que no será “un sobreviviente”.

Cómo hemos analizado, el secreto sagrado de los “cambiados” excedía la comprensión de las épocas pasadas. Siempre la humanidad entendía los extremos de una vida celestial o terrenal. Pero ahora comprendemos que incluso la estructura molecular de los humanos sobrevivientes y vivientes y que no mueran,  será cambiada al ser arrebatados.

Sin duda debe existir una “vestimenta previa” para que esto acontezca.

20 Pero ustedes no aprendieron que el Cristo sea así, 21 si es que, realmente, le oyeron y se les enseñó por medio de él, tal como [la] verdad está en Jesús, 22 que ustedes deben desechar la vieja personalidad que se conforma a su manera de proceder anterior y que va corrompiéndose conforme a sus deseos engañosos; 23 pero que deben ser hechos nuevos en la fuerza que impulsa su mente, 24 y deben vestirse de la nueva personalidad que fue creada conforme a la voluntad de Dios en verdadera justicia y lealtad.- Efesios 4:20-23

Éstas son más que simples palabras bonitas que animan a tener cualidades. Son una realidad viviente e incluso científica. Nuestras cualidades tienen la capacidad de transformar hasta la materia de la que estamos hechos. Si vibramos y nos vestimos con la frecuencia del amor, tendremos la “marca” en la frente para ser rescatados, ya que los ángeles solo rescatará a quienes tengan esa vibración afín a la de ellos. Entonces, al ser rescatados, nuestros cuerpos serán transformados, y “purificados” a nivel atómico para de esa forma participar en la RE-CREACIÓN O REGENERACIÓN de todas las cosas.*

*Nota: La palabra Re-creación (aplicada a la humanidad que entra en el Nuevo Mundo), significa “regeneración; renacimiento”.