Nuestra vida depende en gran medida de reestablecer nuestra conexión con el Padre Celestial. Cuando nuestra conciencia se abre a la realidad de una relación real con Dios, estamos entrando en el "descanso de Dios". Es cómo si lográsemos penetrar en la residencia Divina y sentarnos a su lado en la mansión de su descanso. Desde la fundación del mundo (después del nacimiento de Abel) y por casi 6000 años muy pocos humanos han entrado en ese "descanso de Dios". La nación de Israel a nivel colectivo no apreció esa oportunidad, pero ésta queda reservada para los cristianos a nivel espiritual e individual.
3 Porque nosotros los que hemos ejercido fe sí entramos en el descanso, tal como él ha dicho: “De modo que juré en mi cólera: ‘No entrarán en mi descanso’”, aunque las obras de él habían sido terminadas desde la fundación del mundo. 4 Porque en un lugar él ha dicho del séptimo día como sigue: “Y Dios descansó en el séptimo día de todas sus obras”, 5 y otra vez en este lugar: “No entrarán en mi descanso”. –Hebreos 4: 3-5
¿Qué significa éste "descanso" para nosotros? Recordemos que Jehová Dios en el séptimo día cesó los prototipos materiales de las creaciones para el planeta Tierra. Desde entonces en éste planeta no han seguido realizándose creaciones de seres materiales fìsicos. Es cómo si Dios estuviese en descanso a nivel material. Hoy no vemos manifestaciones sobrenaturales de creaciones ni apariciones de Dios. Es cómo si él Padre no estuviese en una actividad pública. Es como si Dios estuviese descansando, en "vacaciones". Por eso la humanidad hoy no tiene una evidencia masiva de su existencia. Tras el nacimiento de los hijos de Adán, Jehová se reservó el trato con la humanidad a nivel masivo. Es como si hubiese desaparecido de escena (por lo menos a nivel material). Solo con los patriarcas, profetas y hombres escogidos tuvo un trato más directo. Pero el resto de las naciones del mundo, no sabían de las manifestaciones del Dios verdadero. Solo la nación de Israel estuvo a punto de entrar en un trato más directo.
Por eso, aunque Jehová sigue obrando en realizar producciones espirituales (como los 144.000), todos los cristianos (de todas las esperanzas) pueden obtener un privilegio extra: Entrar figurativamente en la zona de "descanso de Dios".
1 Por lo tanto, puesto que queda una promesa de entrar en el descanso de él, temamos que en algún tiempo alguno de ustedes parezca no haberla alcanzado. 2 Porque a nosotros también se nos han declarado las buenas nuevas, así como a ellos también; pero la palabra que fue oída no les aprovechó, porque no estaban unidos por fe con los que sí oyeron.- Hebreos 4:1,2
Aquí habla de como muchas personas, incluso la nación de Israel en conjunto, perdieron la oportunidad de entrar en ese "descanso".
3 Porque nosotros los que hemos ejercido fe sí entramos en el descanso, tal como él ha dicho: “De modo que juré en mi cólera: ‘No entrarán en mi descanso’”, aunque las obras de él habían sido terminadas desde la fundación del mundo. 4 Porque en un lugar él ha dicho del séptimo día como sigue: “Y Dios descansó en el séptimo día de todas sus obras”, 5 y otra vez en este lugar: “No entrarán en mi descanso”. - Hebreos 4:3-5
Aquí se recalca como Israel perdió dicha magnífica oportunidad. Sin embargo, algunos a nivel individual, durante éste gran periodo de 6000 años lograron entrar en dicho "descanso".
6 Por lo tanto, puesto que falta que algunos entren en él, y aquellos a quienes primero se declararon las buenas nuevas no entraron a causa de desobediencia, 7 vuelve a señalar cierto día, al decir después de tanto tiempo, en [el salmo de] David: “Hoy”; tal como se ha dicho antes: “Hoy, si ustedes escuchan la propia voz de él, no endurezcan sus corazones”. 8 Porque si Josué los hubiera conducido a un lugar de descanso, [Dios] no habría hablado después de otro día. 9 De modo que queda un descanso sabático para el pueblo de Dios. 10 Porque el hombre que ha entrado en el descanso [de Dios] ha descansado él mismo también de sus propias obras, así como Dios de las suyas. - Hebreos 4:6-10
Ésta obras de las cuales "descansa" el ser humano no son solo las obras de la carne y las obras muertas. Dios no descansó de obras muertas. Más bien, es la actitud con la que el hombre enfrenta su vida. Tiene que ver con lograr una conciencia de que Cristo y el Padre es el que lleva la carga de nuestra vida. Es dejar al Padre que él se encarge de nuestras cargas y trabajos duros. De por sí ésta actitud nos protege también de las obras muertas y la desobediencia.
11 Hagamos, por lo tanto, lo sumo posible para entrar en ese descanso, por temor de que alguien caiga en el mismo modelo de desobediencia. 12 Porque la palabra de Dios es viva, y ejerce poder, y es más aguda que toda espada de dos filos, y penetra hasta dividir entre alma y espíritu, y entre coyunturas y [su] tuétano, y puede discernir pensamientos e intenciones de[l] corazón. - Hebreos 4:11,12
Nuestra desobediencia tiene que ver con la falta de Fe y confianza en Dios. Por lo tanto, podemos ya entrar en ese "descanso" si nos conectamos con nuestro Padre Celestial. Jesús habló de orar en "el cuarto privado". Ésto debe hacerse si no tenemos rincones cercanos de naturaleza y tranquilidad. De lo contrario, podemos ir a un parque o a un lago y meditar y orar. Notaremos grandes cambios si lo hacemos todos los días. Tendremos un gran sentimiento benéfico, una gran seguridad y paz interior, propia de éste lugar de "descanso" (la relación estrecha con Dios). Si no lo podemos hacer, usemos la mañana temprano para estar a solas con Dios, incluso si vivimos en una casa llena de gente. Busquemos un cuarto privado o el jardín para conversar y tener contacto con el Creador.
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Esta relación nos colmará porque estaremos ante la más viva y dinámica experiencia de nuestra existencia. Lo más importante, es avanzar en esa aventura personal de nuestra relación con el Creador. Esta relación basada en el Amor de corazón a Dios y al prójimo constituye el auténtico "pasaje" para la Vida Eterna. Entonces, al tener esa comunión íntima con Dios, estaremos entrando ahora en "su lugar de descanso".
Cualquiera que more en el lugar secreto del Altísimo
se conseguirá alojamiento bajo la mismísima sombra del Todopoderoso. - Salmo 91:1
Y finalmente ese "lugar de descanso" será llevado a un plano material, cuando por los 1000 años finales de ese "descanso", Dios nos eleverá a una relación tan estrecha con él, que comprenderemos el estado pleno de perfección como Hijos del Altísimo.
